¿Sigue siendo imprescindible el bidé en el baño? Descubre qué hacer y explora algunas alternativas
Todos hemos pensado alguna vez en remodelar alguna estancia de la casa. Ya sea porque el estilo ya no se ajusta a nuestros gustos, para ahorrar espacio o incluso para hacer más sencilla la logística de la rutina diaria. Y lo cierto es que a la hora de decidir por dónde empezar, muchas personas comienzan por el cuarto de baño. Y una de las grandes preguntas para aquellos que deciden remodelar su cuarto de baño está relacionada con el bidé, si es realmente necesario en un cuarto de baño o es mejor sustituirlo.
Antaño considerado un elemento valioso en la composición de los cuartos de baño, la necesidad y/o importancia del bidé en el hogar ha sufrido algunos cambios. Hoy en día, algunas personas prefieren otras soluciones más ergonómicas y cómodas. Veamos algunas de las ventajas e inconvenientes del bidé en la actualidad y si sigue teniendo sentido mantenerlo en el cuarto de baño.
- ¿Quién creó el bidé y para qué se utiliza?
- Bidé en el baño: ventajas e inconvenientes
- Inodoro bidé empotrado: una alternativa moderna
¿Quién creó el bidé y para qué se utiliza?
Hacia 1600, esta especie de «orinal» apareció en Francia en los dormitorios. Como no existían los cuartos de baño que conocemos hoy, toda la higiene íntima se realizaba en los propios dormitorios. El bidé, por supuesto, sólo era común entre la nobleza y la burguesía.
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Algunos países europeos que seguían de cerca las costumbres de la corte francesa, como Portugal, también empezaron a adoptar el bidé para la higiene íntima. Con la introducción del agua corriente en el siglo XIX, los cuartos de baño se separaron de los dormitorios.
Pronto se popularizaría y, aunque la gran mayoría de los hogares siguen contando con este accesorio, quienes buscan un diseño de baño más moderno han buscado alternativas al bidé.
Bidé en el baño: ventajas e inconvenientes
Para algunos es una pieza indispensable, para otros un elemento antiguo e innecesario, el bidé ha suscitado una serie de debates sobre sus ventajas e inconvenientes. Para simplificar las cosas, le mostraremos algunos pros y contras para que pueda decidir finalmente si mantener o sustituir el bidé al remodelar su cuarto de baño.
Ventajas del bidé
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- Organización: el bidé queda bien en baños cuadrados o rectangulares, ya que permite que el baño cumpla todas sus funciones: inodoro y bidé, lavabo y ducha. Si se coloca en las esquinas, no planteará ningún problema de movilidad;
- Comodidad e intimidad: a algunas personas que viven solas les encanta utilizar el bidé porque les ofrece intimidad. También puede ser utilizado como una pequeña bañera por aquellos que tienen bebés o incluso como una forma de llenar jarras de agua para regar las plantas;
- Sensación de comodidad: usar el bidé proporciona una sensación inmediata de limpieza después de ir al baño. También es bienvenido durante los meses de calor;
- Versatilidad y variedad de modelos: en Portugal y otros países europeos donde el bidé es muy famoso (por ejemplo, Italia) existen bidés para todos los gustos adaptados a diferentes espacios, lo que facilita su uso a quienes desean conservarlo al remodelar;
- Ahorro de presupuesto: si utilizas el bidé ahorrarás en el consumo de agua, porque obviamente la cantidad de agua utilizada es menor que la de la ducha. También ahorrará en papel higiénico, lo que contribuye a reducir el impacto medioambiental.
Desventajas del bidé
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Independientemente de si aprecia o no la presencia de un bidé en su cuarto de baño, su instalación requiere un coste adicional. La sustitución del propio bidé en una remodelación puede requerir una ampliación del espacio. Otras desventajas de las que puede darse cuenta son:
- Requiere mantenimiento: como cualquier otro equipamiento, debes realizar un mantenimiento periódico y cuidadoso del bidé para que siga siendo funcional. Es imprescindible para evitar atascos;
- Limpieza obligatoria: su limpieza debe ser constante, prácticamente después del uso, para evitar la acumulación de bacterias;
- Limitación de la movilidad: todas las personas con movilidad reducida pueden encontrar en el bidé un obstáculo para sus movimientos en el cuarto de baño. Puede no ser práctico en baños para personas que utilizan sillas de ruedas o andadores. En estos casos, se recomienda disponer únicamente de un inodoro con barras de apoyo, por ejemplo;
- Limpieza de sólo unas pocas partes del cuerpo: al utilizar el bidé sólo limpiará unas pocas partes del cuerpo y se lavará una parte cada vez, empleando más tiempo que en un baño interior en la ducha o bañera.
Inodoro bidé empotrado: una alternativa moderna
El inodoro con bidé incorporado es actualmente la alternativa más popular al bidé tradicional para quienes están remodelando su cuarto de baño y consideran indispensable este equipamiento. El inodoro bidé empotrado dispone de una miniducha que se acciona intuitivamente con un simple botón.
Roca
Aunque el precio del inodoro bidé empotrado es más elevado que el del bidé tradicional, tendrá en casa un equipo de calidad, moderno e innovador. Normalmente, las opciones de inodoro bidé empotrado disponibles en el mercado -como los modelos Roca- se caracterizan por su adaptabilidad a cualquier cuarto de baño, así como por la doble función de lavado y secado para mejorar la higiene personal. La evolución de la tecnología garantiza que estos equipos sean prácticos y sostenibles.
Estamos seguros de que con estos consejos podrás tomar la decisión correcta y darte cuenta de si sigue teniendo sentido tener un bidé en casa.
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